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Plantilla:Ficha de libro El Túnel es una novela corta argentina escrita por Ernesto Sábato en 1948. Juan Pablo Castel, personaje principal y narrador, cuenta desde la cárcel los motivos que lo llevaron a asesinar a María Iribarne, su amante.

Trama por capítulos[]

Capítulo 1 y 2[]

“Bastará decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne; supongo que el proceso está en el recuerdo de todos y que no se necesitan mayores explicaciones sobre mi persona”. (capítulo 1)

La novela comienza con una presentación del personaje principal. Enumera sus características principales: se llama Juan Pablo Castel, es pintor y un personaje conocido por ser un asesino encarcelado.

Capítulo 3 a 5[]

En el salón Primavera en 1946 Castel presentó un cuadro llamado Maternidad. A la exposición acudieron críticos de arte y observadores ocasionales. Una mujer se acercó al cuadro para verlo detenidamente y posó su mirada en una escena, una joven mirando al mar desde una ventana. La mujer que observaba el cuadro era María Iribarte, sólo ella pudo percatarse de la soledad representada en la ventana pintada del cuadro.

Castel se enamoró de María por ese pequeño gesto, un amor que se fue convirtiendo en obsesión a tal grado que pronto comenzó a buscarla por toda la ciudad. “Durante los meses que siguieron, sólo pensé en ella, en la posibilidad de volver a verla”. (cap. 3) Incluso llega a fantasear con su encuentro y lo que le dirá.

Capítulo 6 a 8[]

Castel se encuentra con María y le pregunta su opinión acerca del cuadro. Al comienzo ella se sonroja y parece como si no entendiera de qué le habla, la situación se torna incómoda “La muchacha estaba próxima al llanto. Pensé que el mundo se me venía abajo, sin que yo atinara a nada tranquilo o eficaz” (cap. 6) . Ante tal circunstancia decide marcharse. No obstante; María lo sigue para disculparse por su comportamiento y decirle que recuerda constantemente la escena de la ventana en el cuadro, después de esto huye.

Capítulo 9 a 12[]

Tras una constante búsqueda de reencontrarse con María consigue verla. La toma del brazo y se la lleva a la fuerza a la plaza San Martín con el propósito de preguntarle el motivo de su huida. Ella responde que no lo sabe. “—Prométame que //angela branagan// no se irá nunca más. La necesito, la necesito mucho —le dije” (cap. 9). Él es un personaje fuerte, con características violentas, mientras que ella es dispersa y apática.

En la noche decide llamarla por teléfono pero termina decepcionado por la decisión ya que María le cuelga argumentando que en ese momento no puede hablar.

Al día siguiente, agitado por la llamada, decide hablarle de nuevo pero lo atiende una mujer que le dice que su amada se ha ido al campo pero le ha dejado una carta. Decide ir a casa de Maria por la carta. Le abre la puerta un hombre ciego que dice ser esposo de su amada: “—No me llamo Iribarne y no me diga señor. Soy Allende, marido de María” (cap. 12). Le entregó la carta que abrió presuroso, en ella se podía leer: “Yo también pienso en usted. MARÍA” (cap. 12). Finalmente, le cuenta que su esposa se encuentra en una estancia con su primo Hunter.

Capítulo 13 a 16[]

Después de conjeturar una serie de hipótesis Castel le escribe a María pidiéndole una explicación acerca de su matrimonio y de su estancia con Hunter. Su relación comienza a estrecharse a tal grado que él se siente con derecho a exigirle fidelidad. Se convierte en un paranoico que hace preguntas y conjeturas de todo.

Capítulo 17 a 20[]

Durante más de un mes Juan Pablo atormenta a María con preguntas de su vida privada y con celos por la presencia de Hunter. La recrimina constantemente por sus actos.

—Dejemos de lado las consideraciones de formas: me interesa el fondo. El fondo es que sos capaz de engañar a tu marido durante años, no sólo acerca de tus sentimientos sino también de tus sensaciones. La conclusión podría inferirla un aprendiz: ¿por qué no has de engañarme a mí también? Ahora Comprenderás por qué muchas veces te he indagado la veracidad de tus sensaciones. Siempre recuerdo cómo el padre de Desdémona advirtió a Ótelo que una mujer que había engañado al padre podía engañar a otro hombre. Y a mí nada me ha podido sacar de la cabeza este hecho: el que has estado engañando constantemente a Allende, durante años.

Por un instante, sentí el deseo de llevar la crueldad hasta el máximo y agregué, aunque me daba cuenta de su vulgaridad y torpeza.

—Engañando a un ciego (cap. 19).

Capítulo 21 a 25[]

—Debido a las discusiones Castel comienza a beber. Una noche sueña que un hombre lo convierte en pájaro. A pesar de verse transformado nadie se da cuenta excepto él. Despierta asustado y llama a casa de María para pedirle perdón pero al enterarse de que se encuentra en la estancia le manda una carta, Ella le responde con una invitación a que vaya a visitarla. Cuando llega a la estación “Allende” es recogido por un chofer que le informa de la indisposición de María para recogerlo. En la estancia Hunter y su prima Mimí lo reciben y comienzan a interrogarlo sobre su pintura.

Capítulo 26 a 28[]

María sale de su habitación y se va a la playa con él con el pretexto de ver algunos de sus dibujos. Frente al mar ella le comenta que se encontraba muy conmovida por la ventana en el cuadro que pintó Castel y como deseaba conocerlo porque sentía que ambos eran parecidos, los dos buscaban a alguien para no estar solos.

—A veces me parece como si esta escena la hubiéramos vivido siempre juntos. Cuando vi aquella mujer solitaria de tu ventana, sentí que eras como yo y que también buscabas ciegamente a alguien, una especie de interlocutor mudo. Desde aquel día pensé constantemente en vos, te soñé muchas veces acá, en este mismo lugar donde he pasado tantas horas de mi vida (cap. 27).

Al regresar a la estancia Hunter que parece celoso comienza una discusión con María. Castel creyó que se debe a que hay una relación entre ellos por lo que decide marcharse a su habitación y por la mañana irse de la casa.

Capítulo 29 a 33[]

Castel decepcionado por lo que pasó se va a los bares a beber, pelear y maltratar mujeres. Le envía una carta a María en donde le explica su huida de la estancia y le reclama que le pone los cuernos a Allende, su esposo, y a él con Hunter. Al poco rato de enviar la carta se arrepiente e intenta recuperarla pero no lo logra ya que los empleados se lo impiden porque no conservó el recibo. Molesto por la situación decide llamarle a María para exigirle que vuelva Buenos Aires, la amenaza con suicidarse si no viene. Ante la amenaza ella decide aceptar la cita.

Castel visita a Lartigue, un amigo cercano a Hunter, para preguntarle sobre la relación de Hunter y María. Lartigue niega esa relación un poco nervioso lo cual hace que sólo se levanten más las sospechas de Castel. Posteriormente, llama María para citarla al día siguiente a las cinco.

Capítulo 34 a 39[]

María no acude a la cita. Castel la llama a su casa sólo para enterarse de que regresó temprano a la estancia. Enojado le pide un coche a un amigo diciéndole que su padre está enfermo y le urge viajar. Inmediatamente se dirige a la estancia. Una vez ahí, como si fuera una pesadilla, trepa hasta la parte alta por la reja de la ventana. Camina por la terraza hasta la galería interior y busca la alcoba de María. Empuña el cuchillo y entrá en la habitación, María aterrada le pregunta qué hace y Castel responde: “—Tengo que matarte, María. Me has dejado solo” (cap. 38). Luego clavó el cuchillo varias veces en el pecho y vientre de María.

—A las 4 de la mañana llegó a Buenos Aires, agitado, visitó a Allende para informarle que María los engañaba a ambos con Hunter pero ya no lo haría más. Allende le grita “Insensato”. Después corre a la comisaría y se entrega por su crimen, Allende se suicida después de eso y Castel se queda en la cárcel pensando en su crimen: “Sólo existió un ser que entendía mi pintura. Mientras tanto, estos cuadros deben de confirmarlos cada vez más en su estúpido punto de vista. Y los muros de este infierno serán, así, cada día más herméticos”(cap. 39).

Temas de la novela[]

Violencia[]

Juan Pablo Castel es un personaje sumamente violento que reproduce un esquema violencia en la relación: acción dañina seguida de un arrepentimiento. Busca que María dependa de él, que lo necesite, para que de esa manera no pueda alejarse y no lo deje solo. Por otra parte, María es un personaje un tanto sumiso que no sabe poner un límite de manera firme.

Además Castel es un personaje posesivo y celoso que se crea fantasmas imaginarios. Son sus celos precisamente lo que lo lleva a asesinar a María. Constantemente Juan Pablo interroga a María con un lenguaje cortante incitandola a que le responda de manera asertiva pero ella no lo hace.

Necesito verla, María —repetí con violencia—. No he hecho otra cosa que pensar en usted desde el mediodía. Ella no respondió.

—¿Por qué no responde?

—Castel... —comenzó con indecisión.

—¡No me diga Castel! —grité indignado.

—Juan Pablo... —dijo entonces, con timidez. Sentí que una interminable felicidad comenzaba con esas dos palabras.

Pero María se había detenido nuevamente.

—¿Qué pasa? —pregunté—. ¿Por qué no habla?

—Yo también —musitó.

—¿Yo también qué? —pregunté con ansiedad.

—Que yo también no he hecho más que pensar.

—¿Pero pensar en qué? —seguí preguntando, insaciable.

—En todo.

—¿Cómo en todo? ¿En qué? (cap. 10)

Soledad[]

La soledad se puede ver representada en la metáfora del túnel. Castel camina por un túnel del cual se encuentran alejadas las demás personas, va solo. Al matar a María le dice que lo hace porque lo ha dejado solo. Le teme a la soledad y busca a alguien que lo comprenda, que lo acompañe. También María busca a alguien, al final es eso lo que los lleva a conocerse.

No, ni siquiera ese muro era siempre  así: a veces  volvía  a  ser de  piedra  negra y  entonces yo no  sabía  qué  pasaba  del otro  lado,  qué  era  de  ella  en  esos  intervalos  anónimos,  qué  extraños  sucesos  acontecían;  y  hasta pensaba  que  en  esos  momentos su rostro  cambiaba y  que  una  mueca  de burla  lo  deformaba  y  que quizá había risas cruzadas con otro y que toda la historia de los pasadizos era una ridícula invención o creencia mía y que en todo caso había un solo túnel, oscuro y solitario: el mío, el túnel en que había transcurrido mi infancia, mi juventud, toda mi vida (cap. 36).

Contexto histórico[]

La primera edición de la novela se dio a conocer en 1948. Dos años después de la llegada al poder de Juan Domingo Perón, quien implementó un movimiento conocido como peronismo o justicialismo llamado de esa manera porque su objetivo era la justicia social.[1]

El mismo año Argentina participó en los Juegos Olímpicos de Londres con 199 competidores. Ganó 3 medallas de oro, 6 de plata y 3 de bronce que sumaron un total de 11. En el ámbito literario Julio Cortázar publicó Cirse.

Personajes[]

Principales[]

Juan Pablo Castel. Narrador y protagonista de la historia. Se obsesiona con María Iribarne al creer que es la única que lo entiende; trata de poseerla por completo pero al no poder hacerlo se ve cegado por los celos y decide matarla.

María Iribarne. A pesar de que siente afecto por Juan Pablo nunca se entrega a él completamente. Se encuentra casada con Allende.

Secundarios[]

Allende. Es el esposo de María Iribarne. Está ciego. Conoce a Castel cuando éste visita su casa para buscar la carta que le dejó María en su primera visita a la estancia. Castel lo busca luego de asesinar a María para contarle su crimen. Ante esto el le grita “insensato” (cap. 38). Lo último que se sabe de èl es su suicidio.

Hunter. Primo de Allende. Castel sospecha que es amante de María.

Terciarios[]

Mimí. Prima de María.

Lartigue. Amigo de Hunter.

Aceptación de la crítica.[]

Las primeras críticas de la obra se encontraban divididas en dos vertientes: por un lado, se encuentran aquellos que hacen un análisis psicológico del personaje principal, por el otro los que hacen un análisis filosófico basado en los postulados del existencialismo de Sartre. Todos coinciden en que el personaje principal Juan Pablo Castel es esquizofrénico. En los últimos años surgido otra corriente cuyas producciones se pueden encontrar en tesis principalmente y que se dedica a ver los aspectos estructurales de la obra.

Agustín F. Seguí es el más representativo de la primera corriente. En su artículo “Los cuatro sueños en El Túnel de Ernesto Sabato” menciona:

En un trabajo reciente creo haber demostrado que las novelas de Sábato no pueden interpretarse satisfactoriamente recurriendo sólo a las perspectivas existencialistas: muchos asuntos de peso no se entienden cabalmente mientras no se toma en consideración la densa temática de lo psicopatológico, sobre todo en relación con los protagonistas masculino.[2]

En este artículo analiza los sueños de Castel mediante los postulados de Freud. El punto central es tratar de descubrir si se encuentra frente a un personaje esquizofrénico o solamente paranoico.

Ana Paula Ferreira[3] retoma para su análisis los postulados de Lacan. Su interpretación es que Juan Pablo encuentra en María la satisfacción a su complejo de Edipo; además él se proyecta en María lo cual lo lleva a desear poseerla como un objeto y obligarla a que realice determinadas acciones que van de acorde con sus propios pensamientos. Las etapas de desarrollo propuestas por Lacan son sufridas por el personaje principal a lo largo de la narración.

En cuanto a la segunda corriente Norbeto M. Kasner[4] mira la novela desde el concepto de la soledad:

Los personajes de ambas novelas participan de una intensa búsqueda de una respuesta al enigma existencial, tratando de disipar al mismo tiempo la soledad emocional en que se encuentra. Castel, el protagonista de El Túnel trata vehemente de crear lazos afectivos con María, la única persona que parece comprender su arte. Es aceptado por los críticos y por la sociedad en general; sin embargo, interiormente se siente solo y alienta la esperanza de que algún día vendrá a una su vida con la suya, dándole así posibilidades de ser feliz.[4]

En cuanto a esta vertiente se puede decir que tiene menos seguidores, incluso hay algunos críticos que optan por aceptar la lectura canónica de Castel como un esquizofrénico, pero sin prestarle gran importancia o discutirlo para pasar a otros temas como la soledad.

Finalmente, existen estudios aislados sobre otros aspectos de la novela, principalmente en su estructura, el tiempo y los discursos que aparecen.

Adaptaciones cinematográficas[]

  • El túnel. Director: León Klimovsky. Adaptación de Ernesto Sabato. Intérpretes: Margarita Burke, Alfredo Distasio, Juan Ehlert, Enrique Fava.
  • El túnel (película para televisión). Director: José Luis Cuerda. Intérpretes: Fernando Hilbeck, Eva León, Gerardo Malla, Fernando Méndez Leite, Mónica Randall, George Rigaud.
  • El túnel. Guion: Carlos A. Cornejo y Antonio Drove. Dirección: Antonio Drove. Intérpretes: Jane Seymour, Peter Weller, Manuel de Blas, Fernando Rey, Marga Herrera, Yelena Samarina.

Referencias[]

  1. Plantilla:Cita libro
  2. Plantilla:Cita libro
  3. Plantilla:Cita libro
  4. 4,0 4,1 Plantilla:Cita libro

Enlaces externos[]

  • Celebración de los 60 años de la publicación de "El Túnel"[1]
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